Trozos de trazos
Deseaba ella que el
momento continuara para siempre tal como era precisamente en aquella mañana de
julio. Y los momentos no perduran […] En todo caso, la vida no es más que una
procesión de sombras, y sabe Dios por qué, siendo sombras, las abrazamos con
tal anhelo y las vemos partir con tanta angustia.
Virginia Woolf
Fragmento: El cuarto
de Jacob
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