Foto: Fátima Rodríguez

21 septiembre, 2015

Magia


Sería bueno salir de este cuarto
escribir sobre la movilidad de los transeúntes
su incansable repetición de pasos
que forman un círculo de vuelta a casa.
Pero en vez de eso
hablo de números, túneles y puentes.
Se pensaría que soy un ingeniero
que donde ve el vacío, monta el puente
donde ve el cerro, abre un túnel
producto de planos
y operaciones donde los números
danzan con signos babilónicos.
Y si pareciera magia, no existe alguna:
es su ciudad y su vida elaborada
para llevar y comer en el sillón
frente al documental más exótico
y ajeno.


Carolina Olguín

Libro de la vigilia